Una tardenoche cultural

Bueno... aprovechando que Sigi nuestra nueva pasante de Alemania llego a Venezuela y estaba mostrandole cosas interesantes de Caracas, nos topamos con que la Sinfónica Juvenil simón Bolívar estaba presentandose en el Teatro Teresa Carreño y aprovechamos para verla ya que la entrada era por el impresionante precio de Bs. 5000. Todo empezó muy bien pues aunque nuestras entradas de módico precio nos habían situado en los rincones más reconditos del Teatro, nos permitía ver en su totalidad a los músicos.

La primera pieza fue una gran pieza y esto lo digo tanto por lo buena como por lo larga, y lo malo es que el friito del teatro sumado con la oscuridad y esa música de fondo provocaba un sueño inmenso y sino que le pregunten a Sigi que mas de una vez la vi cabeceando en el asiento de al lado.

Pero luego del intermedio todo mejoró, de alguna manera el agua nos quito el sueño y nos preparamos para la segunda y tercera pieza que probaron ser hasta mejores y el director se llevó un gran aplauso de nuestra parte.

Y cuando parecía que había mejorado suficiente y era hora de seguir la noche en otro sitio nos encontramos con la sorpresa de que estaban dando vino blanco y rojo asi como whiskey y pasapalos a todos los asistentes al concierto. Que gran forma de empezar la noche!!!

Por cierto hubo unos niñitos muy fastidiosos en el brindis lanzando bolitas de papel... si los niños son el futuro esos eran Bush y Chavez in the making!